Exsocios de Pablo Escobar lo abandonan para unirse a Los Pepes, acrónimo de Perseguidos por Pablo Escobar, un grupo paramilitar cuyo propósito era el de buscar cualquier tipo de colaboradores para capturar a Pablo Escobar, y en el cual terminaron involucrados el Gobierno de Colombia, la DEA, la CIA e industriales de Antioquia.

A pesar del papel que jugaron "Los Pepes" en la caída de Pablo Escobar, las autoridades colombianas lograron elaborar un sofisticado plan de inteligencia que terminó con la baja del criminal más buscado de Colombia.

Efectivos del Bloque de Búsqueda finalmente logran localizar a Pablo Escobar y darle muerte, después de que este, desesperado, intentara comunicarse con su familia.

La muerte de Pablo Escobar causa por un lado gran alegría y alivio, sin embargo, por otro lado, los seguidores de Pablo Escobar lloran su muerte y parte del pueblo colombiano no cree en el final del narcotráfico ni la violencia.

Con la muerte de Pablo Escobar, la sociedad colombiana espera la tan ansiada paz. Sin embargo, grupos paramilitares derivados de los distintos carteles comienzan a planificar cómo llegar a lo más alto del gobierno de Colombia.

Después de la muerte de Pablo Escobar, los ejércitos privados florecen y el narco paramilitarismo toma su lugar continuando así el control de colombia bajo el reinado de carteles narcos y guerrillas.