Mientras que Cata está afuera con Toño, Kevin se regala un par de horas de muy buena meditación adolescente.

Cuando Kevin le pregunta a Cata acerca de sus relación con Toño, se da cuenta que él no es el único que está confundido.

Aunque Kevin nunca ha escuchado a sus papás decir la palabra "relación", sí puede decir que los ha escuchado discutir.

La mamá de Kevin está lista para compartir con su familia su nueva pasión. Sin embargo, la familia no muestra un gran entusiasmo.

Mientras que la frustración de Kevin aumenta con la excesiva curiosidad de Fede, su madre trata infructuosamente de sorprender a su esposo con una de sus nuevas creaciones artísticas.

La tensión en la casa es alta y Kevin trata de recuperar la armonía familiar con un acción osada.

La tensión en la casa sigue alta y el intento de Kevin por calmar la situación no da los frutos esperados.

A pesar de los elogios que recibe la mamá de Kevin de sus hijos, la armonía se pierde rápidamente con una nueva discusión.

Después de la fuerte discusión entre los papás de Kevin, la casa se sumerge en un profundo silencio.

Después de muchas tensiones, la paz vuelve a la casa y Kevin no deja de hacer profundas reflexiones al respecto.

La casa de los González se enfrenta a un nuevo reto familiar: la obsesión del papá de Kevin con la música vallenata.

En medio de la discusión familiar, Kevin comete un error mortal que lo pone de frente a una situación confusa.

La mentira que le dijo Kevin a su padre le dará otra amarga sorpresa que lo meterá en una situación bastante complicada.

El padre de Kevin sorprende a su hijo con un regalo que terminará creando tensión en la casa.