Mientras Pablo revisa su correo electrónico, Ana y Sam se divierten viendo comerciales de televisión.

Pablo tiene noticias excitantes y se prepara para un cambio de vida, pero Lola tiene otra idea.

Mientras Ana recuerda su participación en una publicidad, Sam intenta hacer palomitas "estilo americano".

Pablo le cuenta a Sam algunas cosas de su pasado como actor. Por su parte, a Sam se le ocurre una idea después de ver un anuncio de chocolate en televisión.

Lola y Ana recuerdan una situación del pasado con un detergente y Pablo actúa como si ya fuera una gran estrella, por lo que Lola, Ana y Sam deciden hacerle una broma.

Mientras que Ana lleva a su perro Luis a caminar, Sam se las ingenia para hacerle a Ana su postre favorito: Chocolate Perfección. Le saldrá bien?

Lola, Ana y Sam se llevan una grata pero divertidísima sorpresa cuando descubren lo que su amigo Pablo hace en la televisión.

Mientras Ana practica con Sam cómo actuar en un anuncio de Chocolate Perfección, Pablo regresa corriendo del estudio debido a una situación peculiar.

Hoy es el día del sorteo de La Primitiva y hay que seguir ciertas reglas de Lola para mantener la buena suerte. ¿Cuáles son?

Todo parece ir bien para los chicos de Extra. Pablo consiguió una cita y parece que han salido los númeors de Lola en la Primitiva.

Lola y Ana sueñan con todo lo que podrían hacer con la lotería que se acaba de ganar Lola. Al fin de cuentas, ¿qué podría salir mal?

Pablo y Sam están en graves problemas con Lola! Han regresado al apartamento pero no saben qué han hecho con el tiquete ganador de la Primitiva. ¿Podrá Lola conseguir su premio a tiempo?

¿Qué idea se le ocurrirá a Pablo para encontrar el resguardo de la Primitiva? ¿Y por qué Lola está enfadada con Sam?

Son las diez menos diez y están a punto de transmitir los números ganadores de la Primitiva. Lola está muy enfadada porque ni Sam ni Pablo encuentran su resguardo. Sin embargo, el destino tiene más sorpresas.

A la hora de reclamar su premio de la Primitiva, Lola se lleva una gran decepción. Pablo, por su parte, también se lleva una decepción cuando finalmente intenta conectar con Emilia por teléfono. Y cuando parece que el día no puede empeorar, ¡sí que lo puede!